Uno de los temas más recurrentes en cualquier implementación Lean es la importancia de la Gestión Visual.

Es habitual escuchar sentencias infundadas que dicen que la Gestión Visual es únicamente necesaria en entornos donde la capacitación es menor, o únicamente en entornos productivos tradicionales, donde lo físico esta de alguna forma más presente que lo digital.

Gestión visual: ¿Qué es?

La Gestión Visual es clave en cualquier espacio de trabajo, pues permite la fácil y rápida comprensión del status, del objetivo y del proceso a seguir para lograr desempeñar el trabajo requerido. Facilita la aplicación del sentido común, reduce la curva de aprendizaje y permite mantener a todo el equipo alineado.

La Gestión visual es clave, por ejemplo, para lograr una buena experiencia del usuario en el desarrollo de aplicaciones para nuestros móviles o tablets, en donde el aprendizaje intuitivo y autónomo es clave para la viabilidad de una propuesta.

La Gestión Visual es un concepto sencillo, pero en ocasiones, difícil de llevar a la práctica.

Gestión Visual, Visual Management, o “Mieruka”, puede resultar muy útil para lograr mejorar la comprensión de lo que está sucediendo, pero si no se aplica de forma correcta, puede suponer un gran desperdicio.

El objetivo principal de esta metodología es lograr que la situación se comprenda fácilmente con solo un vistazo en el que obtener la mayor cantidad de información con la observación más breve posible. Está altamente relacionado con los conceptos previamente  “Genchi Genbutsu” y “5s” ,explicados en otros artículos.

Una máxima que se suele utilizar a la hora de buscar el benchmark en Visual Management es:

Lograr que el lugar de trabajo sea capaz de mostrar cuál es la situación actual, el flujo y la secuencia de trabajo, sin necesidad de explicación complementaria por parte del personal.

Pantallas de información

Una forma habitual de Gestión Visual en nuestras plantas son las pantallas de información o Pantallas Andon, altamente relacionadas con “Jidoka”, en las que podemos entender de un vistazo cual es la situación de la producción frente a los objetivos, el estado de las diferentes workstations y las posibles necesidades para el Group Leader.

Esta forma de gestión visual no es la más intuitiva, aunque en algunos casos no hay alternativas mejores.

Información en KPIs

Otra forma de mostrar indicadores, resultados, y objetivos son los KPIs en papel y los cuadros de Daily Management. Idealmente es preferible que la información sea actualizada de forma manual por los responsables, ya que de esta forma conocerán y comprenderán mejor la información visible.

La gestión visual en estos cuadros comprende un sinfín de herramientas como los gráficos, diagramas, colores, tablas, símbolos…

Algo importante a tener en cuenta es que la información debe estar en el punto de uso, pues permite el acceso libre a la información allí donde es necesaria. De nada sirve guardar esta información en un ordenador, para lo cual necesitaremos una clave de acceso, y un tiempo para buscar la información que de lo contrario podría estar siempre al alcance de todo el equipo.

Gestión Visual en suelo, herramientas y otros elementos

La Gestión Visual utiliza habitualmente líneas, sombras o etiquetas para definir y delimitar ubicaciones.

Son habituales en cuadros de herramientas, en puestos de trabajo para delimitar los diferentes elementos y o en el suelo, para identificar zonas…

Gestión visual con el proceso

En muchas ocasiones la mejor Gestión Visual es la que viene implícita en el proceso.
De poco sirve delimitar con líneas un proceso inverosímil y cruzado que no nos permita entender de forma intuitiva cual es el paso a paso a seguir. “Keep things simple” que se suele decir.

A su vez, una estantería “FIFO” es un buen ejemplo de Gestión Visual, pues de forma intuitiva, nos permite conocer cual es el material que debemos de utilizar a continuación.

De la misma forma, un Stock de producto gestionado con un sistema Kanban de cajas, nos permite entender con un vistazo rápido cuál es el material que debe ser suministrado a continuación.

En definitiva, aplicar Gestión Visual en un entorno de trabajo puede ser crucial a la hora de evitar errores imprevistos, desconocimiento de estándares y objetivos, largos periodos de adaptación y aprendizaje, falta de involucración, pérdidas inconscientes de productividad y eficiencia y muchos otros desperdicios que, gracias a ella, seremos capaces de conocer y corregir de forma más ágil y efectiva.

Fuente: Toyota Material Handling.